Extraños

Desperté en una mañana sin ecos
Tumbada en una playa de piedras donde rompían olas cenicientas
El tiempo se ha tornado espeso otra vez
Y me doy cuenta que camino sobre rostros en gritos muertos.
Pensé atravesar esta avenida de penas por alguien
Pero ahora entiendo que no vale la vida, ni la muerte.
Los sollozos de la sociedad me han mostrado mas que tus ojos
Es porque estos no mienten.
El dolor nunca miente, pero si enseña, entrena y te cambia.
Mis manos tan blancas siempre están heladas, así pretendo dejarlas.
Me pierdo sola en el abismo.
Me pierdo y no vuelvo.
La paz esta en medio de la tormenta, y es donde me siento mejor.

Sauce

Ella se sento a la sombra del sauce.

La tarde de ese verano le había regalado un agradable frescor con olor a pepino y limón. 

Apiló el montón de cartas a su lado y fue tomando una a una. 

Cada carta correspondia a una misma persona, que en el transcurso de 30 años habia pasado por mas de estado emocional persistente, pero a pesar de eso ella aun le quería. 

Tomo un cuchillo de su morral y cortó un pedazo de manzana, escasas en esos tiempos. 

Contemplo el cielo, de azul palido y ceniciento, pero del cual ya estaba acostumbrada. 

Ese lugar lo había convertido en su santuario años atrás, cuando al fin pudo huir del barullo de la metropolis. 

Tener cartas en papel poliuretanizado era un recuerdo tangible y lleno de afecto, el cual llevaba siempre consigo.

Tomó la primera.

Mientras leía recordaba cada sentimiento que le embargaba en esos días, volvia a tener 30 años, y todo parecía un torbellino de pensamientos confusos pero esperanzados.

Una abeja se posó en su manzana. 

Siguió tomando carta tras carta. El dolor de estomago, las emociones entrecruzadas y la desepciones nuevas volvian. Pero siempre cada año las cosas se veian con esperanzas. Cada año los sentimientos crecian, pero a la vez hacian mas daño.

Carta tras carta veía a su remitente ir y volver, sus cambios, sus ideas, sus planes y promesas cambiaban con la luna, y provocaba mas vacio en su interior. 

Recordó como la amarró su persona, tomando el resto de su vida a la ligera con otras personas. 

Vio en esas cartas como había sido que su corazon y mente se endurecian. 

Cuando se alejaba de ella en su primer matrimonio, cuando quería mas hijos, cuando viajaba con su familia.

Aveces el fue su escusa, su protector, su amigo, su pena y su nada. 

Cuando la tarde se empezo a tornar rojiza llegó su marido a buscarla. 

Él sabía del ejercicio de alma que hacía su señora cada Julio. 

Cuando se conocieron le habia costado entrar en su corazón y mundo, pero al fin le habia mostrado un nuevo comienzo, logró cerrar un ciclo eterno.

Todo los recuerdos los habia desechado, salvo esas cartas, esas viejas y marchitadas cartas, como las manos de quien las leía y releìa.

Ella levantó al fin la vista y se cruzó con esos ojos brillantes que jamás perdieron juventud.

Estiro su brazos hacia el, y se incorporó con cuidado. Lo abrazó y caminaron juntos a su casa. 

La brisa movio su falda y se entrelazo en su cabello. 

Había terminado su ritual anual que le habia dejado el tiempo. 

Tomó con fuerza el brazo de quien la habia ayudado a levantarse de todo en su vida.

Mira hacia la luna y pensó - ya es tiempo de tirarlas. 

Algunos pensamientos que trato de ocultar

Él sabe que me gusta.
Y no se si esté bien o mal.
No se si sabe cuánto lo quiero, y es que lo quiero mucho.
Quiero verlo feliz, no se como ayudarlo 
Lo triste es que no nos entendemos, estamos en diferentes frecuencias, o a veces en las misma, pero en diferente tiempo.
El es testarudo, yo también lo soy.
Pero lo quiero y lo sigo queriendo.
Quiero hablar horas con él, quiero escuchar y descubrir música con él.
Quiero que salgamos a caminar, por algunas cervezas, y recordemos nuestros miedos y payasadas infantiles.
Quiero confesarle mis miedos, y sentir como el los apacigua
Quiero que sigamos siendo amigos, quiero que cuando suene mi teléfono sea él.
Me enojo, se enoja... Ninguno se acerca.
No se si pedir perdón, lo que le dije fue porque quiero verlo, pero no quiero que eso sea un problema para él. Yo noto como trata de evadirme cuando hay posibilidad de vernos.
Me ilusiona tanto pensar que lo podre ver, pero simplemente no aparece, y me deja tan mal. Duele.
Cuando dice que nos veremos un tiempo deje de creerle. Solo le decía que si.
Pero luego llegó, de las formas mas improbables.
Pensé que podríamos vernos, nunca da una respuesta concreta, jamás. De verdad pensé que esta vez si, pero no fue así. Su motivo por él cual quiere verme o no es el mismo. El mismo dijo cual era, y no me gustó para nada saber que es solo por algo tan vanal... Cuando aveces uno sólo necesita un amigo, un abrazo...
Otra vez no nos hablamos. No se que se supone que tengo que hacer, además de extrañarlo demasiado.
Quizá dejar que el tiempo borre, sane o disuelva todo.
Si se, y realmente se es que lo quiero y lo sigo queriéndo, mucho.

Con o sin ti, mi vida seguirá igual.

Quisiera besarte en cada oración que escribo.
Quisiera que todo fuera mas fácil, pero jamás quisiera hacer el intento.
A pesar de que salga con otro, a pesar de que estes con otra, siento que esto perdurará ... O así lo quiero.
Tengo terror de sentir algo por ti, o que lo hagas por mi, porque no se quien soy.
Me gusta hablarte, y que lo hagas.
Me gusta esas juntas apuradas que aveces son un hola, pero que me ayudan a no olvidar el color de tus ojos.
Quisiera que no se detuviera, y quisiera que el tiempo me esperará para saber si podre entregarme a ti, o tu a mi.
Estoy en un extraño y feo momento de mi vida en donde no puedo ofrecer nada.
Empezando por mi corazon, amor, fidelidad etc.
Y se que tu también.
Creo que tu entiendes, o quiza solo pasas los días ... Se que tu vida te tiene frustrado, al igual la mía.
Pero quizá aun nos falta por esperar.
No es el tiempo aun, o, quizá nunca lo sea.
Pero si que conocerte ha sido una aventura muy rara, grandiosa en parte, emocionante, exitante; pero a la vez dolorosa y vacía.
Quiza nunca debimos cruzarnos, y nadie lo entiende.
Nos han dicho que deberíamos estar juntos, que tenemos mil cosas en común, que nos vemos bien juntos... Pero eso es solo a la vista. Quiza no complementamos en absoluto.
Seguiré siendo tu amiga, y tu me has dicho lo mismo.
Quiza en 4 años, quiza en 10...quiza nunca.
Quiza cuando este lista, y tu igual, pero se ve que ninguno lo esta o estará pronto.
Te quiero y te extraño... Extraño los bobos juegos que solo nosotros entendemos.
Pero me gusta soñar aun en como sería esa aventura, con todas tus mañas y antojos, tus odios y amores, tus costumbres y tu folclore que sueles rechazar.
Quiza de verdad sea locura y dure, o quiza nos mate esta chispa costante.