sábado, 12 de diciembre de 2020

Fuera de tiempo

 En la oscuridad de una habitación, los pensamientos corren como un rio transparente. Ves saltar pequeños peces de emociones, intercalados con algunos  deseos.

En este tumultuoso momento cavilativo, me pongo a recordar momentos bellos, lejanos y tristes. Porque cuando todo debe terminar, se termina de la forma mas fuerte que puede haber. La caída del telón fue estridente. Rompio todo lo que estaba a su paso.

Entonces me quedo ahí, en mis sentimientos bloqueados por miedo, mi corazón completamente bloqueado queriendo sentir libremente latiendo con ardor. Pero yo no lo dejaba.

Y después de tanto tiempo, después de tanto camino, volver a reencontrarse con esos sentimientos, y saber que si eran correspondidos es un doble corazón roto. Dos veces lo perdí, dos veces lloré. 

Mi ímpetu de superar mis sueños y expectativas personales estallaron luego de volver a ver sus ojos, y su pena. Me duele mas saber su dolor que lo que me pueda pasar a mi; uno esta acostumbrado a vivir en miseria y oscuridad mental. Pero no queria arrastrarlo a eso. No se lo deseo a nadie, mucho menos a él. 

Mi queridísimo, tan enamorada y rota. Antes no pudo ser, no tenía nada bueno que dar, ahora no puede ser, el daño trizo el delicado hielo donde nos queriamos. Siento que nos encontramos antes de tiempo y hoy es demasiado tarde.

Que se puede hacer con un sentimiento tan bello, algo difícil para mi, siempre me ha costado enamorarme, lo puedo recitar aquí pero de mi boca no puede salir. Díganme ¿dónde guardo eso? Creo que lo atesorare, en mi corazón, en un lugar especial al cual volveré cada vez que sienta que mi soledad me congela las articulaciones. 



Quisiera tanto volver a estar con él...