lunes, 11 de septiembre de 2017

Rara

Si mirase al interior de mi mente ahora,
No estoy segura del escenario que esta tendria.
Quiza hay en una parte muchos colores,
Dulces, musica, pequeñas chispitas sin miedo, brillantes.
Todo eso en un costado, burlandose de ese escombrillo de polvo y cascaras que hay en un rincon menos llamativo. Cascaritas de nueces alborotadas, con zapatitos de gamuza que resuenan al correr para esconderse, timidas, muy timidas, que solo se asoman para ver que pasa con los amigos que vuelan.
Esos voladores raros tambien estarian ahi, de grandes orejas y sin ojos, atentos a los estimulos del corazón, y que hechan a volar en el momento en que este se acelera con un escaso contacto con su mano.
Tambin esta ella, una coqueta esperanza joven, vigorosa y creida que anda a grandes zancadas por el centro del lugar, y que reniega a juntarse con las viejas esperanzas. Estas se sientan a beber vino y fumar tabaco puro, y solo hablan de recuerdos casi triunfales que en algun momento las hicieron bailar.
Hay un viejo reloj que da vueltas, se acelera y se aletarga. El reloj tambien va unido al corazon, y su tiempo demora segun los latidos o la ocasion. Por oscio gusta de alargar el minutero cuando camino a casa agotada, soñando con mi sofa, o acelerarlo cuando tengo una buena conversacion en un bar con cerveza de sabores.
Tambien se alborota con los coloridos amagos, y salta por todos lados, botanto engranajes y tuercas, que quedan esparcidos, montando un desorden terrible.
Creo que si, tambien habria una explosión plastica de recuerdos en medio de todo, ordenado en degrade, y con formas sentimantales por todas partes.
Y el peor lugar es aquel muy al fondo, y que cada vez crece mas en este mundillo...y es el vacio. Esta oscuro y claro a la vez, y con solo verlos te devuelve un eco. Este espacio está disponible para cualquier inquilino, y eso me aterra, porque acepta de todo. Esta ahi, y muy seguido acepta el dolor en sus brazos, y que juntos detienen todo aqui. Todos se duerme, todo se apacigua y cae en silencio...pero no es cualquier silencio. Se le puede parecer al sonido que hace un televisor al conectarse mal a un canal. Es aqui cuando las esperanzas abren su cajon de las reservas y comparten con todos el dulce y triste vino.
Se sientan y miran el suelo.
Las cascaritas beben poquito, pero se atreven a estar todo ese tiempo fuera de su rincón solitario.
Y es aqui donde estamos.
Salud...supongo.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario

"Tambien digo "jo" muchas veces. En parte porque tengo un vocabulario pobrisimo, y en parte porque a veces hablo y actuo como si fuera mas joven de lo que soy."